Últimos temas
¿Quién está en línea?
En total hay 37 usuarios en línea: 0 Registrados, 0 Ocultos y 37 Invitados Ninguno
El record de usuarios en línea fue de 392 durante el Jue 18 Oct 2012 - 7:22
Conectarse
Buscar
NO HAY QUE RECHAZAR LA AUTOCOMPASIÓN
Página 1 de 1.
NO HAY QUE RECHAZAR LA AUTOCOMPASIÓN
NO HAY QUE RECHAZAR LA AUTOCOMPASIÓN
En mi opinión, es preferible desechar esa idea equivocada de que sentir compasión por uno mismo es un acto de debilidad que hay que evitar a toda costa.
No es cierto. No hay que evitarlo. Pero tampoco es necesario quedarse estancado en la compasión lastimosa y paralizadora, ni es necesario conformase únicamente con el significado menos atractivo de la palabra.
La compasión lleva incluido un sentimiento de pena –esto es cierto- y de tristeza, pero lo único que eso ha de hacer es que terminemos de comprender que somos Humanos, y como tales tenemos derecho a hacer vivenciales todos los estados emocionales –incluidos los menos agradables-, y que además tenemos la capacidad de recuperación, los instintos de mejoramiento y supervivencia activados, y pujante el impulso vital a seguir hacia adelante y hacia mejor.
La compasión implica también un sentimiento de ternura, y cualquier sentimiento de ternura hacia uno mismo es un gran paso en la reconciliación con nosotros mismos que todos tenemos pendiente; la ternura nos humaniza y nos pone en contacto con nuestro auto-amor y nuestro corazón, y despierta nuestra naturaleza más sensible y sentimental, así que siempre ha de ser bienvenida.
La compasión es empatía, es amabilidad y generosidad, es cordialidad y paz.
Es el primer gran paso en cualquier proceso que quiera ser presidido por la verdad, porque la verdad es que todos nos hemos equivocado alguna vez, todos nos tenemos un rencor declarado u oculto en alguna parte, y todos necesitamos perdonarnos y aceptarnos plenamente con todos los errores que hayamos cometido en nuestro pasado o sigamos cometiendo en el presente.
Tener compasión no es algo que tenga que llevar implícito necesariamente un menosprecio o una aflicción, no tiene que estar obligatoriamente relacionado con un inevitable resentimiento, no debe encubrir una rabia que no se quiere reconocer y se oculta.
Desarrollar una sana autocompasión parte de tener una buena relación con uno mismo, y una buena relación debería carecer de cualquier tipo de conflicto personal, ya que por muy soterrado que esté va a estar mal influenciando sin duda.
Hay cosas que no se dicen pero se sienten.
Hay silencios cargados de reproches.
Para comenzar a desarrollar una sana autocompasión, es necesario reconocer y aceptar todo el pasado y todo lo pasado –TODO-, aceptarlo incondicionalmente y sin añadir a ello ningún reproche. Hay que comprender que equivocarse y no tomar las decisiones adecuadas es algo que entra dentro de lo “normal”, y que es habitual acumular errores y equivocaciones a lo largo de la vida.
Es conveniente hablarse y tratarse con amabilidad, ser delicado y atento cuando uno trate consigo, mostrar y demostrarse cariño y auto-cuidado, y preservarse porque uno es lo más importante en su vida y la razón de su vida.
Si uno se trata bien, la relación consigo se suaviza y, sin duda, se logran más y mejores cosas por las buenas y con amor que por las malas y con frialdad o rencor.
Todos llevamos dentro incrustado un crítico, despiadado e injusto, excesivamente riguroso, poco comprensivo y poco perdonador, que analiza cada uno de nuestros actos con la intención de encontrar un motivo para reprocharnos. Es un enemigo imparable que nunca se pone de nuestro lado y sólo tiene ojos para ver lo que considera que hacemos mal.
Con la práctica de la autocompasión uno va suavizando a ese inquisidor y va desdramatizando la vida y rebajando la tensión que produce tener que tomar tantas decisiones a lo largo del día.
Todos somos eternos aprendices en esto de vivir, porque ninguno estamos preparados para hacerlo siempre del modo adecuado. No nos prepararon para ello.
Y nos tenemos que tratar como tales –eternos aprendices-, y ser comprensivos, y ser amigos en todas las circunstancias y a pesar de todo.
Tenemos que tratarnos con mucho cariño, hablarnos de un modo positivo -como nos hablaría quien más nos quiere-, siempre con una sonrisa de ánimo, y estando siempre y en todo momento de nuestro lado y a nuestro favor.
Autocompasión es Autocomprensión. Y eso es bello. Y es adecuado y beneficioso.
Somos Humanos y hemos de amarnos. La compasión es símbolo de bondad, de altruismo, y de reconciliación.
El amor propio es el amor más grande.
Asume esto.
Te dejo con tus reflexiones…
Francisco de Sales
“Oír o leer sin reflexionar es una tarea inútil”. (Confucio)
Si te ha gustado ayúdame a difundirlo compartiéndolo.
(Más artículos en http://buscandome.es/index.php?action=forum)
En mi opinión, es preferible desechar esa idea equivocada de que sentir compasión por uno mismo es un acto de debilidad que hay que evitar a toda costa.
No es cierto. No hay que evitarlo. Pero tampoco es necesario quedarse estancado en la compasión lastimosa y paralizadora, ni es necesario conformase únicamente con el significado menos atractivo de la palabra.
La compasión lleva incluido un sentimiento de pena –esto es cierto- y de tristeza, pero lo único que eso ha de hacer es que terminemos de comprender que somos Humanos, y como tales tenemos derecho a hacer vivenciales todos los estados emocionales –incluidos los menos agradables-, y que además tenemos la capacidad de recuperación, los instintos de mejoramiento y supervivencia activados, y pujante el impulso vital a seguir hacia adelante y hacia mejor.
La compasión implica también un sentimiento de ternura, y cualquier sentimiento de ternura hacia uno mismo es un gran paso en la reconciliación con nosotros mismos que todos tenemos pendiente; la ternura nos humaniza y nos pone en contacto con nuestro auto-amor y nuestro corazón, y despierta nuestra naturaleza más sensible y sentimental, así que siempre ha de ser bienvenida.
La compasión es empatía, es amabilidad y generosidad, es cordialidad y paz.
Es el primer gran paso en cualquier proceso que quiera ser presidido por la verdad, porque la verdad es que todos nos hemos equivocado alguna vez, todos nos tenemos un rencor declarado u oculto en alguna parte, y todos necesitamos perdonarnos y aceptarnos plenamente con todos los errores que hayamos cometido en nuestro pasado o sigamos cometiendo en el presente.
Tener compasión no es algo que tenga que llevar implícito necesariamente un menosprecio o una aflicción, no tiene que estar obligatoriamente relacionado con un inevitable resentimiento, no debe encubrir una rabia que no se quiere reconocer y se oculta.
Desarrollar una sana autocompasión parte de tener una buena relación con uno mismo, y una buena relación debería carecer de cualquier tipo de conflicto personal, ya que por muy soterrado que esté va a estar mal influenciando sin duda.
Hay cosas que no se dicen pero se sienten.
Hay silencios cargados de reproches.
Para comenzar a desarrollar una sana autocompasión, es necesario reconocer y aceptar todo el pasado y todo lo pasado –TODO-, aceptarlo incondicionalmente y sin añadir a ello ningún reproche. Hay que comprender que equivocarse y no tomar las decisiones adecuadas es algo que entra dentro de lo “normal”, y que es habitual acumular errores y equivocaciones a lo largo de la vida.
Es conveniente hablarse y tratarse con amabilidad, ser delicado y atento cuando uno trate consigo, mostrar y demostrarse cariño y auto-cuidado, y preservarse porque uno es lo más importante en su vida y la razón de su vida.
Si uno se trata bien, la relación consigo se suaviza y, sin duda, se logran más y mejores cosas por las buenas y con amor que por las malas y con frialdad o rencor.
Todos llevamos dentro incrustado un crítico, despiadado e injusto, excesivamente riguroso, poco comprensivo y poco perdonador, que analiza cada uno de nuestros actos con la intención de encontrar un motivo para reprocharnos. Es un enemigo imparable que nunca se pone de nuestro lado y sólo tiene ojos para ver lo que considera que hacemos mal.
Con la práctica de la autocompasión uno va suavizando a ese inquisidor y va desdramatizando la vida y rebajando la tensión que produce tener que tomar tantas decisiones a lo largo del día.
Todos somos eternos aprendices en esto de vivir, porque ninguno estamos preparados para hacerlo siempre del modo adecuado. No nos prepararon para ello.
Y nos tenemos que tratar como tales –eternos aprendices-, y ser comprensivos, y ser amigos en todas las circunstancias y a pesar de todo.
Tenemos que tratarnos con mucho cariño, hablarnos de un modo positivo -como nos hablaría quien más nos quiere-, siempre con una sonrisa de ánimo, y estando siempre y en todo momento de nuestro lado y a nuestro favor.
Autocompasión es Autocomprensión. Y eso es bello. Y es adecuado y beneficioso.
Somos Humanos y hemos de amarnos. La compasión es símbolo de bondad, de altruismo, y de reconciliación.
El amor propio es el amor más grande.
Asume esto.
Te dejo con tus reflexiones…
Francisco de Sales
“Oír o leer sin reflexionar es una tarea inútil”. (Confucio)
Si te ha gustado ayúdame a difundirlo compartiéndolo.
(Más artículos en http://buscandome.es/index.php?action=forum)
Francisco de Sales- Cantidad de envíos : 1674
Fecha de inscripción : 15/12/2012
Temas similares
» LA BELLEZA DE LA AUTOCOMPASIÓN
» LA BELLEZA DE LA AUTOCOMPASIÓN
» CAPÍTULO 55 - RECHAZAR LA CABALLEROSIDAD
» NO HAY QUE RECHAZAR EL DOLOR. HAY QUE VIVIRLO.
» LA BELLEZA DE LA AUTOCOMPASIÓN
» CAPÍTULO 55 - RECHAZAR LA CABALLEROSIDAD
» NO HAY QUE RECHAZAR EL DOLOR. HAY QUE VIVIRLO.
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
|
|
Vie 16 Feb 2024 - 7:11 por Francisco de Sales
» SUFRIMOS MUCHO E INNECESARIAMENTE.
Lun 5 Feb 2024 - 18:18 por Francisco de Sales
» ES CONVENIENTE QUE TENGAS CLARO QUÉ ES PARA TI LA FELICIDAD Y QUÉ ES TRIUNFAR.
Jue 25 Ene 2024 - 18:15 por Francisco de Sales
» RESPETA Y EXIGE QUE TE RESPETEN.
Lun 22 Ene 2024 - 16:59 por Francisco de Sales
» ANTES Y DESPUÉS: LA MUERTE Y LA VIDA.
Jue 18 Ene 2024 - 17:44 por Francisco de Sales
» CADA DÍA ME HE ALEJADO MÁS DE MÍ
Lun 15 Ene 2024 - 4:14 por Francisco de Sales
» NO PERMITAS QUE NADA NI NADIE TE HAGA DAÑO.
Mar 9 Ene 2024 - 21:47 por Francisco de Sales
» CON UNA AUTOAFIRMACIÓN CONSTANTE SE CONSTRUYE UNA AUTOESTIMA SÓLIDA.
Vie 5 Ene 2024 - 16:51 por Francisco de Sales
» DEJARSE ENCONTRAR POR DIOS.
Mar 2 Ene 2024 - 17:58 por Francisco de Sales
» SI YO HUBIERA…
Jue 28 Dic 2023 - 15:44 por Francisco de Sales
» CÓMO CONTROLAR LA MENTE.
Dom 24 Dic 2023 - 19:44 por Francisco de Sales
» LA INTROSPECCIÓN ES OBLIGATORIA EN LOS PROCESOS DE DESARROLLO PERSONAL.
Jue 21 Dic 2023 - 17:34 por Francisco de Sales
» HE COMETIDO EL PEOR DE LOS ERRORES: NO HE SIDO FELIZ.
Mar 19 Dic 2023 - 16:48 por Francisco de Sales
» DI ADIÓS A LO QUE NUNCA SERÁS.
Dom 17 Dic 2023 - 17:40 por Francisco de Sales
» CÓMO ES LA VIDA VIVIDA DESDE LA TRISTEZA
Mar 12 Dic 2023 - 5:41 por Francisco de Sales
» NO TE TOMES NADA COMO ALGO PERSONAL.
Lun 30 Oct 2023 - 17:58 por Francisco de Sales
» ESCAPA DE LOS PENSAMIENTOS NEGATIVOS
Mar 24 Oct 2023 - 22:03 por Francisco de Sales
» ¿QUÉ QUIERO PARA MÍ?
Lun 16 Oct 2023 - 17:38 por Francisco de Sales
» ¡CUÁNTO TIEMPO DE VIDA DESPERDICIAMOS!
Sáb 7 Oct 2023 - 17:59 por Francisco de Sales
» ¿TIENES MIEDO A TOMAR DECISIONES? ¿NO SERÁ QUE A QUIEN TIENES MIEDO ES A TI?
Miér 4 Oct 2023 - 22:21 por Francisco de Sales
» ¿QUÉ PUEDO MEJORAR DE MÍ?
Vie 22 Sep 2023 - 17:50 por Francisco de Sales
» TODOS TENEMOS QUE HACERNOS UN BUEN PLAN DE VIDA.
Sáb 16 Sep 2023 - 4:48 por Francisco de Sales
» ¿POR QUÉ NO TIENES AMOR PROPIO?
Mar 12 Sep 2023 - 17:04 por Francisco de Sales
» CUÁNTAS COSAS HE HECHO DESDE QUE NACÍ.
Vie 8 Sep 2023 - 1:52 por Francisco de Sales
» VIVIR MAL LA VIDA.
Sáb 2 Sep 2023 - 18:08 por Francisco de Sales